Reciclar es vivir. Respirar. Sentir. El proceso ecológico de reutilización de los residuos es una dinámica de cambio implementada desde hace 20 años. Es necesario mantener un chip de actitud proactiva y saber que el planeta está agotando sus recursos, empeñándolos para las próximas generaciones.
De ahí que la importancia de poseer un ecosistema de reciclaje disponible para los usuarios con el objetivo de cambiar la rutina, es una prioridad de los líderes, los grupos de interés y todos los actores involucrados en este tipo de procesos. Lo anterior con el objeto, tan sencillo a simple vista, pero profundamente visible en cuanto a nuestra educación ecológica, de poner correctamente la basura en las canecas para reciclar.
A lo que se sigue que la separación en la fuente es crucial, ya que permite distribuir los residuos de manera eficiente, ahorrando tiempo que puede invertirse en otros procesos relacionados o derivados con el tratamiento de las basuras. Esta parte del proceso es útil para facilitar el manejo de los residuos al delegar en un tercero la responsabilidad de depositarlos en lugares seguros para los propósitos de reciclaje industrial.
Si repasamos la ajetreada vida moderna, toda implementación que tienda a garantizar el reciclaje es bien recibida por la comunidad. Por ejemplo, en el caso de las organizaciones, los puntos ecológicos han sido incorporados para manejar con precisión el proceso interno de alto impacto por parte de la población tanto flotante como permanente que hace uso de sus instalaciones. Como parte de la cadena de reciclaje, los contenedores de basura cumplen con funciones de almacenaje y de disposición de los residuos a gran volumen para que los riesgos que éstos comportan sean mínimos para la ciudadanía en general.
De lo anterior se desprende que el compromiso ciudadano es fundamental. Las administraciones deben promover el uso eficiente de este tipo de recipientes para el reciclaje, además de proveer todas las soluciones para que los residuos lleguen a sus puntos de recolección sin que haya riesgo alguno. Se estima que la responsabilidad ciudadana en la consecución de logros relacionados con medio ambiente y sostenibilidad oscila entre un 75 por ciento y un 90 por ciento siempre y cuando líderes, actores y grupos de interés, establezcan con claridad campañas de apropiación y uso responsable del reciclaje.
Su caso es particular pero está conectado a la situación global del reciclaje. Recuerde lo mencionado algunos párrafos arriba: estamos empeñando, como sociedad, los recursos de las siguientes generaciones. Considere implementar soluciones compactas de reciclaje que estén conectadas a la cadena de manejo de residuos en su ciudad.
Un pequeño aporte como las canecas metálicas, los puntos de reciclaje por colores y contenedores con asas que faciliten la labor de los equipos de limpieza y reciclaje es la mejor manera de juntar esfuerzos para que la sostenibilidad sea viable a largo plazo en la sociedad.
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Articulo tomado de: Canecas de Reciclaje
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